lunes, 12 de agosto de 2013

Danilo el terrible


por Pablo Iván

En general, es difícil encontrar jugadores completos; si se entiende por “completo” a un tipo que reúna varias condiciones o cualidades como futbolista. Si hasta al Diego, el mejor de todos los tiempos, le costaba con la derecha. Incluso, a algunos ni se les nota cuál es esa capacidad sobresaliente. Sobran tipos que los ves jugar y llegás a preguntarte: ¿cómo hizo este sujeto para llegar a la Primera División, para ser profesional, para ganar dinero por jugar al fútbol? ¿Qué es lo que otros le ven que yo no veo?

En el caso de Belgrano, el hincha es menos exigente que en otros clubes. Lo imprescindible y excluyente es meter, poner huevos, ir al frente. La condición en sí, es una yapa. Fundamental que se entregue, que transpire. Después, si juega bien, si demuestra alguna cualidad física o técnica, mucho mejor.

Cientos de jugadores pasan inadvertidos a los ojos del hincha durante su vida. Son demasiados planteles, partidos, torneos. Sacando a los ídolos, o a los que consiguieron logros deportivos, sólo un reducido conjunto de jugadores quedan grabados por siempre en las retinas. 

El caso del santafesino Danilo Tosello es una rareza, digna de recordar. ¿Era buen jugador de fútbol? Lo dudo. Pero tenía, más que una condición, un don extraordinario: la pegada. Nunca, en 30 años, vi un jugador pegarle con tanta precisión a la pelota parada. Más que futbolista, parecía jugador de billar. Penales no erraba. Un tiro libre cerca del área era letal. Era tan excelente pateador que en su haber cuenta con varios goles olímpicos. Habría que explorar mucho, no sólo en Argentina sino en el mundo, para encontrar un jugador que patee al arco desde el banderín con tanta puntería. Danilo Tosello hacía del córner una amenaza para la red. 

Le apodaban el “Gringo”. Llegó a Belgrano en 1995, proveniente de 9 de julio de Rafaela, y jugó sólo una temporada, convirtiéndose en el goleador del equipo con 10 tantos en el torneo clausura. Su paso por Alberdi me es inolvidable. En ese momento, el pirata peleaba el descenso –perdería la categoría finalmente- y Danilo era la carta principal de gol. Recuerdo claramente cómo desde las tribunas se rogaba por un foul cerca del área. El equipo era limitado y costaba horrores embocarla, pero un tiro libre nos dejaba al borde de la conquista. Danilo era la esperanza. A eso apostábamos en el terreno de juego: a que el número 10 tuviera una cerca del área, la acomodara y la clavara al ángulo. 

La memoria es frágil, como para enumerar los 10 goles de Tosello vistiendo la celeste. Me queda el gol olímpico que le convierte a Newell´s en el Chateau Carreras, en el arco que da a la popular Sur. Pateó desde el rincón de la platea cubierta, con su pierna más hábil, la zurda. La pelota viajó combada por el aire y se le metió a un arquero que apenas alcanzó a tocarla. Un tal Rubén, en el blog la Redó declara: “Tengo en la memoria un misil al ángulo que le clavó a Chilavert en un Belgrano-Vélez en Córdoba, lo que no me acuerdo es si fue de jugada o de tiro libre”; yo tampoco lo recuerdo. Otro hincha: “El Luifa Artime también dijo que Tosello y Maradona eran los mejores pateadores de tiros libres”; nada más cercano a la realidad. 

A ese campeonato de 1995 lo jugamos en el Chateau, a diferencia del apertura, en el que fuimos locales en cancha de Instituto. Épocas de equipo sin figuras, promedio flaco, chomba Nanque. Gigante de Alberdi abandonado con los yuyos altos. Épocas en que se abrían las puertas en el segundo tiempo, para que los “sin una moneda” pudieran ver los cinco minutos finales de un partido.

 La carrera deportiva de Tosello continuó en Deportivo Español, Tigres (México), Defensor Sporting (Uruguay), Olimpia (Honduras) y Unión de Sunchales. Hoy es el DT del Olimpia hondureño. En este posteo subo algunos goles, para que sean testigos de lo que narro y consideren que no exagero.
 

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Que grande ati! Mi primer idolo danilo y un referente de chico jaja! Abrazo. Precio!

Dalai Arias dijo...

¿Puede ser que es gol a Chilavert que se menciona en la nota no haya sido de Tosello sino de Sebastián Brusco? Recuerdo que se turnaban para chutar los tiros libres, aprovechando la tremenda fuerza de uno, y la exquisita precisión del otro.

Anónimo dijo...

el gol a chilavert lo hizo tosello y despues velez lo dio vuelta sobre la hora con un gol de camps de cabeza...